3. Perspectivas en EA. Articulaciones regionales.
Edgar González Gaudiano (méxico), Dimas Floriani (Brasil), Isabel Martínez (Panamá) y Elisabeth Carlucci Sbardelini y Nelton Friederich (Brasil) y coordinado por Guillermo Priotto, miembro de la Unidad de Coordinación de Educación Ambiental (Argentina).
Tras la presentación del panel “Perspectivas regionales en Educación Ambiental: La contribución en Iberoamérica”, se realizó la tercer y última conferencia central a cargo de destacados especialistas internacionales.
Edgar González Gaudiano, desarrolló un análisis histórico crítico de la situación de la educación ambiental en América Latina, donde los problemas ambientales no tienen prioridad en las agendas de gobierno locales, lo que dificulta pensar la inserción de la educación en este sentido. A su vez, señaló las diferencias entre pensar una educación ambiental y una educación para el desarrollo sustentable, a menudo considerada un compartimento estanco respecto al resto.
El educador mexicano apeló, entonces a la necesidad de una profesionalización de los especialistas de la región, y tras reconocer ciertos avances surgidos durante los `90 con nuevos centros de investigación en la materia, reclamó por una mayor legitimación de la educación ambiental tanto en el ámbito público como privado.
La revisión crítica de la actividad científica y el papel que debe asumir América Latina frente a una educación para la sustentabilidad fueron algunos de los ejes de las disertaciones. Profesor titular de la Universidade Federal do Parana, Curitiba, Florián recordó que es en el espacio de la producción científica que se genera la búsqueda de nuevos contenidos y formas de construcción de saberes. Sin embargo, “las ideas de razón y verdad deben ser siempre resignificadas y convivir con lo dinámico y lo contingente” explicó el docente brasileño. En tal sentido, la racionalidad crítica clásica debe incorporar aspectos “no racionales” y “supraracionales”. “El científico moderno tambalea entre ser libre, en tanto creador de su obra, y ser guardián del orden instituído”, sostuvo D. Florián.
En tanto, el analista abrió el interrogante acerca de “qué papel debe jugar la ciencia en la legitimación de nuevos saberes” vinculados a lo ambiental de modo de transparentar sus resultados. En especial, en lo que respecta a la difusión y control social de la producción de conocimiento. A su vez, se preguntó cómo admitir la investigación de enfoques ya erradicados para re- producirlos en el laboratorio bajo una filosofía basada en la idea de progreso y bienestar. “La ciencia es también política”, sintetizó y agregó que, en relación a la ciencia, “el término Política es del orden de la autoridad”.
Elizabeth Carlucci Sbardelini, filósofa posgraduada en Educación Ambiental de la Universidad de Glasgow (Escocia) y Nelton Friederich, Director Brasileño de Coordinación y Medioambiente de Itaipú Binacional, quienes se refirieron al "Centro de Saberes y Cuidados Socioambientales de la Cuenca del Plata", que expresa la voluntad de las instituciones gubernamentales y no gubernamentales que forman parte de un Acuerdo de Cooperación y participantes de un Pacto que se amplía con el tiempo, para desarrollar un proceso dinámico e innovador que sea producto y productor de distintos niveles de cooperación interinstitucional, que tomaron como ejes principales de sus reflexiones y propuestas los siguientes:
a) El agua como tema integrador;
b) La cuenca como territorio operacional;
c) El pensamiento ambiental como marco conceptual de la acción;
d) La educación ambiental como movilizador social; y
e) La construcción colectiva de conocimientos, acciones y organización
No me resisto a añadir aquí algunos apuntes de la ponencia de la educadora peruana, Eloísa Trellez, recuperó la pluralidad de voces, culturas y paisajes de Iberoamérica y las reunió en una gran polifonía, es decir, “una música variante de la pedagogía ambiental”. Una pieza constituída por siete pasos: El paso del colibrí, donde compara a los educadores ambientales con pequeños colibríes que, gota tras gota cargadas en su pico, buscan apagar un gran incendio con la certeza de “haber hecho lo que está al alcance de sus posibilidades”. El Paso del Tiempo, al afirmar que “con la velocidad nos hemos detenido”, o mejor dicho, que tras la ilusión de inmediatez otorgada por las nuevas tecnologías, “el tiempo nos está comprimiendo sin darnos cuenta olvidando el tiempo de la naturaleza”. El Paso del Desgajamiento, donde la pensadora trasandina nos habla de la necesidad de retornar al “Todo”, porque, en palabras del Maestro Jorge Uribe “nos hemos desgajado del tronco bajo la premisa de una supuesta independencia” sin recordar de dónde venimos en realidad. El Paso de la Evolución y Ayuda Mutua, donde la ayuda mutua es condición para la evolución y el avance de la especie, retomando a Charles Darwin y sus 200 años de la Teoría de la Evolución. El Paso de la E-moción (entrar en movimiento), con hincapié en la creatividad y en el arte como formas de despertar la sensibilidad del mundo. El Paso del Buen Humor y la Ternura, ligados a la salud y la convivencia con el otro y por último, el Paso de la Escucha del amor, como una forma de escuchar al otro y construir el conocimiento a través de la acción participativa.
(Tomado de www.ambiente.gov.ar/)